....Y LA LUZ SE HIZO

Corría el mes de Septiembre, exactamente el día 7 de 1902,  cuando el alcalde Tomás Beltrán, junto con la Corporación, llegan a un acuerdo para  formar una comisión para ir a Roa, con el objeto de hablar con Don Vicente Taboada, para hacer un estudio y presupuesto, para la instalación del alumbrado público, así como  la potencia que sería necesaria y la duración del contrato.

La comisión estuvo formada por: Juan Sendino Diez, Isidoro Diez Ramos, Ildefonso de la Horra Oña y Lino Vizcarra Zapatero.

El proyecto fue aprobado por la Corporación, pero a la hora de realizarlo se dieron cuenta de que e precisaba un lugar para instalar el trasformador de la luz. Inspeccionados los sitios para su emplazamiento se vio que el mejor sitio para su emplazamiento era al lado de la iglesia, para lo cual se envió una carta al obispado de Osma, para que diese su autorización.
La duración del contrato fue por un periodo de diez años revisable.

Con la puesta en marcha de este proyecto, el Ayuntamiento consiguió que las oscuras calles de la villa se iluminaran por primera vez, por la noche, aunque fuese muy débilmente.

El tiempo fue transcurriendo sin grandes quejas por parte de los vecinos, hasta que en Marzo de 1912, finalizó el contrato de la luz y se precisaba renovarle. Por aquel entonces estaba e alcalde Cristino Esgueva del Val, el cual reunió a la Corporación para exponerles el asunto y enviar a una persona para que fuese al notario de Roa, con objeto de prorrogar el contrato de suministro de luz a Don Vicente Tabeada, cosa que recayó en la persona de Casiano del Val Esgueva.